Estamos terminando la semana y esta es mi primera receta, menuda semanita más mala.
Esta semana ha empezado mal, no ha mejorado según han pasado los días y a ver como termina. Hemos estado en casa todos malos 😦 y aún sigo algo fastidiada, imaginaros como he estado que no tenía ni siquiera ganar de preparar ningún postre.
Como os decía estamos a finales de semana y vamos a preparar el postre para disfrutar el fin de semana.
Esta receta ya la habréis visto, como yo, en muchos blogs y la verdad es que ya tenía ganas de probarla, en todos los sitios donde la he visto hablan maravillas de ella y ciertamente es una tarta de queso especial.
Cuando la preparéis no os esperéis la típica tarta de queso, por que esta es completamente diferente, es mas suave y ligera.
Vamos a preparar nuestra Tarta de Queso Japonesa,
Ingredientes:
- 250 gr de Queso Mascarpone
- 200 gr de Queso Philadelphia
- 150 gr de Azúcar
- 6 Huevos
- 100 ml de Leche
- 50 gr de Mantequilla
- 65 gr de Harina
- 65 gr de Maizena
- 1/2 tsp de Cremor Tártaro
- Ralladura de un Limón
- Una pIzca de Sal
Preparación:
Precalentamos el horno a 160ºC. e introducimos dentro un recipiente con agua lo suficientemente grande para poder poner después el molde con la masa para que se cocine al baño maría.
Engrasamos un molde redondo en mi caso y reservamos. os aconsejo que sea un molde no desmoldable y así evitaremos que se meta agua durante el horneado
Tamizamos la harina, la maizena y la sal y reservamos.
En un cazo a fuego medio ponemos juntos los dos queso, la leche, la mantequilla y el azúcar. Removemos y no pararemos de remover hasta obtener una crema lisa. Retiramos del fuego y reservamos.
Ahora separamos las claras de las yemas y añadimos éstas últimas a la mezcla anterior y junto con la ralladura de limón removemos bien hasta conseguir que todos los ingredientes se integren perfectamente.
Añadimos ahora la mezcla de harina, maizena y sal que teníamos reservada y con unas varillas lo incorporamos poco a poco a la mezcla anterior. Reservamos.
Montamos las claras a punto de nieve junto con el cremor tártaro.
Una vez que estén bien montadas las añadimos a la mezcla anterior con movimientos envolventes y muy suavemente, para evitar que las claras se nos bajen.
Vertemos la mezcla en el molde que teníamos engrasado y reservado y lo introducimos dentro del recipiente que teníamos con agua en el horno, durante 1 hora más o menos ó hasta que observemos que la superficie esté bien dorada.
Apagamos el horno, abrimos un poco la puerta y dejamos que la tarta se haga en su interior durante 5 minutos más.
Sacamos la tarta del horno y dejamos que se enfríe completamente antes de desmoldarla.
Una vez desmoldada, espolvorearemos toda la superficie con un poco de azúcar glass.
Y el resultado
Esta tarta de queso no es como las que conocemos, o por lo menos las que yo conocía.
En inglés recibe el nombre de “soft cotton cake”, ó lo que es lo mismo “tarta de algodón suave” eso os da una idea de lo suave y esponjosa que queda.
No se si lo apreciais en las fotos pero de verdad que es una tarta muy ligera y suave.
Aunque sola está muy buena, en algunos casos, como es el de mi marido, le parece que le falta algo, así que él le pone un poco de mermelada.
Os lo garantizo, no dejeis de probarla, os asombrará.
Bon Appetit