Estamos a viernes y como sabeis este día me encanta, por que por fin se ha terminado la semana. Ya se que soy muy pesada con este tema pero es que no puedo evitarlo, adoro lo viernes jajajajaja
En mi casa no falta pan nunca, a mi marido y mis hijos les encanta y como llevamos ya una temporada sin hacer algún pan nuevo nos vamos a poner manos a la obra.
La receta original la podeis encontrar aqui.
Ingredientes:
- 300 gr de Harina de Espelata blanca
- 300 gr e Harina de Centeno
- 1 yogurt natural
- 200 ml de Agua
- 2 cucharads de miel
- Una pizca de Sal
- 5 gr de levadura de panadero o en su defecto 15 gr de levadura fresca.
Preparación:
Mezclamos las harinas, el yogurt, el agua y la miel y lo dejamos reposar unos 30 minutos (autolísis).
Ahora ponemos la levadura y la sal y amasamos hasta que todos los ingredientes esten bien ligados.
En un bol ponemos bien de aceite, en la encimera haremos una bola con la masa y l aponemos en el bol, se tapa este con plástico y lo dejamos levar hasta que doble su volumen.
Ahora ponemos a precalentar el horno a 220º (210º si lo ponemos con aire)
Cuando la masa haya doblado su volumen la ponemos sobre la encimera y se desgasa.
Haremos un rulo con la masa y lo cortaremos en 12 porciones,aproximadamente, haremos unas bolitas con la masa y las dejaremos sobre nuestra bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, se tapan y se dejan reposar de nuevo hasta que doblen su volumen.
Pasado el tiempo espolvoremos los panecillos con agua y les ponemos las semillas de amapola.
En el horno tenemos una fuente con piedras volcánicas cuando metemos los panecilos, echamos sobre esta agua hirviendo, de este mdo le damos humedad y evitamos que el pan forme costra muy ratpido. Horneamos a 220º durante 10-15 minutos,
A los 15 minutos bajamos la temperatira a 180º y horneamos otros 15 o 20 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla
Y el resultado
Bon Appetit